El primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, anunció el viernes que otorgará subsidios por hasta 13.200 millones de dólares canadienses (unos 9.800 millones de dólares americanos) en diez años para la primera planta de baterías eléctricas de Volkswagen en el extranjero, que se construirá en la provincia de Ontario (centro este).
Este incentivo al fabricante alemán de automóviles coincide con los incentivos de la administración del presidente estadounidense, el demócrata Joe Biden, que puso en marcha la ambiciosa Ley de Reducción de la Inflación (IRA), por la cual se canalizan unos 370.000 millones de dólares en subsidios para fomentar la transición energética en su país.
Los gobernantes europeos ya temen que las empresas con sede en la Unión Europea (UE) puedan mudarse a Estados Unidos debido a los beneficios de la ley.
“Con este proyecto histórico, no solo estamos recuperando la fabricación, estamos recuperando una economía fuerte y próspera para esta comunidad, y estamos entregando un punto de referencia nacional para la cadena de suministro de vehículos eléctricos de Canadá”, dijo Trudeau en una conferencia de prensa.
El primer ministro calificó canadiense al plan de financiación como “una inversión generacional” en una nueva planta que se espera genere alrededor de 150.000 millones de dólares en valor.
Su ministro de Industria, François-Philippe Champagne, dijo que Ottawa espera ver un retorno completo de la inversión dentro de cinco años.
Volkswagen, que anunció en marzo sus planes para construir la planta en St. Thomas, Ontario, está invirtiendo alrededor de 5.000 millones de dólares en la instalación, según un comunicado de la oficina de Trudeau, que la calificó como “la mayor inversión relacionada con vehículos eléctricos en la historia de Canadá”.
La construcción comenzará el año próximo, mientras que la producción de baterías será en 2027.
Se espera que la planta –con un área equivalente a 200 canchas de fútbol– genere hasta 3.000 empleos directos y hasta 30.000 indirectos, según un comunicado.
Hacia los vehículos eléctricos
Volkswagen también está instalando una serie de plantas de baterías eléctricas en Europa. La primera abre este año en Suecia y en 2025 le seguirá otra en Salzgitter, Alemania.
Con esta medida, Volkswagen busca reducir la dependencia de su cadena de suministro en Asia.
También se enfrenta a una dura pelea con su rival estadounidense Tesla por el dominio del mercado de los vehículos eléctricos. Bajo sus diferentes marcas, Volkswagen planea introducir más de 25 nuevos modelos eléctricos para 2030 en Estados Unidos.
Los subsidios del gobierno canadiense de unos 10.000 millones de dólares, cantidad que dependerá de los niveles de producción de baterías, comenzarán a eliminarse gradualmente en 2030 y se eliminarán por completo después de 2032.
La provincia de Ontario también prometió 370 millones de dólares para la planta.
Canadá ha estado dando un gran impulso a las baterías para vehículos eléctricos, promocionando incentivos fiscales, abundantes minerales críticos y energía limpia para atraer a los fabricantes de automóviles.
Cuando se le preguntó acerca de la Ley de Reducción de la Inflación, Trudeau comentó que Canadá “no puede competir” al “mismo nivel” pero “podemos ser muy estratégicos y lo hemos sido”.