Por Teófilo Benítez Granados, Rector del Centro de Estudios Superiores en Ciencias Jurídicas y Criminológicas
En el imaginario popular se asume que un título y una cédula profesional son llaves de movilidad social. Sin embargo, la articulación entre miles de egresados y la absorción del mercado de trabajo sigue sin resolverse.
Así, es común encontrara a un profesionista que está subempleado, a un posgraduado que se convierte en comerciante en el mercado informal o a un taxista que tiene estudios de licenciatura.
En México se avanza en la cobertura de educación superior entre los jóvenes, sin embargo, el aumento de educación formal no incide en el bienestar de la población, en parte porque no se traduce en un incremento de habilidades para el exigente modelo de producción. Escolaridad no es igual a capital humano.
México tiene un universo laboral cada vez más competitivo y complejo, esto obliga a que se ajuste la información que se da en los programas de orientación vocacional a los alumnos de educación media superior. Asimismo, exige que se tenga un recorrido de calidad desde la educación básica y hasta el preámbulo de la superior.
Pero ¿cómo trasladar las nuevas perspectivas profesionales a los orientadores vocacionales si muchos de ellos también se encuentran desfasados?
Una solución puede ser el acceso a la información vía los nuevos sistemas de comunicación que van desde el Internet hasta los sistemas satelitales. Sin embargo, hay que incluir a los medios tradicionales como radio, televisión y medios impresos.
Una vez que se fortalece la información, los posibles alumnos son los que determinan los lugares a ocupar en la matrícula de las instituciones de educación superior, públicas y privadas.
Con la obtención de una perspectiva profesional congruente y alineada se dará un importante paso para solucionar el hecho de que en nuestro país 37% de los profesionistas se dedican a trabajos que no corresponden a los estudios que cursaron.
La Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior (ANUIES), afirma que en México existe una falta de empleo para los egresados de más de 41 licenciaturas debido a que una de cada tres carreras registra una saturación.
Las carreras con mayor demanda en las universidades en las que se concentra más del 40%de la matrícula son Contaduría, Administración, Derecho, Comunicación, Ciencias Políticas, Educación y Pedagogía, Psicología, Turismo, Diseño y Medicina.
Para conocer más sobre lo que se debe estudiar también es necesario que es lo que el mercado demanda en la actualidad. Antes de la pandemia, por ejemplo, el Observatorio Laboral de la Secretaría de Trabajo y Previsión Social federal, había determinado que las carreras mejor pagadas en nuestro país estaban encabezadas por los pilotos aviadores y navales seguido por los ingenieros aeronáuticos y ciencias de la salud. Por supuesto, esto ya no es así. Ahora en la cúspide salarial aparecen profesiones ligadas a las Tecnologías de Información.