Cuba solicitará a inicios de marzo a la Organización Mundial de la Salud (OMS) la “precalificación” de su vacuna anticovid Abdala, para que tenga reconocimiento internacional, informó este martes un alto directivo de la industria biotecnológica.
“Estamos pronosticando que en las primeras semanas, o sea, a principios de marzo, dentro de dos o tres semanas ya estaremos enviado el dossier a la OMS”, dijo Eduardo Martínez Díaz, director BioCubaFarma, fabricante del inmunólogo.
Martínez hizo el anuncio ante la prensa al convocar al Congreso Internacional “Bio Habana 2022“, del 25 al 29 de abril y para el cual más de 100 científicos y empresarios extranjeros mostraron su interés.
Cuba fabrica y aplica cinco vacunas y candidatos vacunales contra el covid-19, pero Abdala y Soberana son las que han tenido mayor uso nacional y en otros países como Venezuela, Nicaragua y Vietnam.
Explicó que su compañía informó a la OMS que el lugar de producción de las vacunas cambiaría de las plantas actuales a un nuevo complejo levantado en Mariel, 50km al oeste de La Habana, inaugurado en diciembre y aún cumpliendo el programa de “puesta en marcha“.
“Nos respondieron que sí, que enviáramos el dossier y cuando estuviera disponible ya la planta en funcionamiento, vendrían a realizar la inspección para otorgar la precalificación”, añadió.
Subrayó que “pensamos que van a hacer reconocidas sin ningún tipo de problemas, nosotros tenemos experiencia, hay otras vacunas nuestras (para otras enfermedades)que han pasado ese proceso de precalificación”.
Consideró que las vacunas anticovid “han demostrado ser muy seguras“, pues hasta la fecha se han aplicado al 88 por ciento de la población, controlando la pandemia y el número de fallecidos.
De 1 millón 062 mil 154 cubanos contagiados, han fallecido 8 mil 476 hasta la fecha y la jornada del lunes cerró sólo con 630 nuevos contagios y sin fallecidos, según el Ministerio de Salud.
Martínez dijo que las primeras pruebas en el Complejo del Mariel cumplieron “los parámetros de calidad“, pero admitió que han tenido problemas de financiamiento e insumos en toda la industria farmacéutica cubana.
“Logramos exportar a finales del año pasado vacunas y un grupo de medicamentos y estamos teniendo dificultades para poder cobrar con la negativa de los bancos en trabajar con nosotros”, debido al embargo de Estados Unidos.
Dijo que esa situación los ha privado de financiamiento para honrar pagos de materias primas, a los que se suma los problemas de comercio internacional provocados por la pandemia.