El coordinador de las y los senadores de Morena, Ricardo Monreal Ávila, aseguró que la disciplina fiscal, el control del gasto, el precio interno de la energía dentro de la inflación esperada, y la creación de empleos a niveles superiores de los previos a la pandemia, permitieron que el país tenga señales de una economía estable.
En un mensaje que publicó en redes sociales, señaló que, a pesar de la inflación mundial y el encarecimiento del costo del dinero, la economía mexicana no se estancó.
Los indicadores fundamentales lucen bien: el peso frente al dólar se fortaleció, la inversión extranjera directa fue la más alta en cinco años y un déficit marginal en la balanza de pagos, expresó.
Agregó que los motores que están incentivando al mercado interno son: el crecimiento sostenido de las remesas, el incremento por cuarto año consecutivo en los salarios mínimos y la inyección directa al consumo, que representan los casi 700 mil millones de pesos de los 18 programas sociales del Gobierno federal.
Todos estos factores, aunados a la inversión en proyectos de infraestructura pública: la refinería de Dos Bocas, el Tren Maya y el Corredor Transístmico, ayudarán al crecimiento económico.
Sin embargo, aseveró que la inseguridad sigue causando estragos, a pesar de todos los esfuerzos del Gobierno federal.
Los números a la baja en materia de homicidios, se diluyen ante el rostro de la barbarie. El crimen organizado avanza en control territorial, el cobro de piso, el pago de protección, impone precios a los productos, que hasta en la más pequeña comunidad se introducen, aseveró.
Monreal Ávila consideró que “la crispación que produce la inseguridad alcanzó a los Poderes del Estado”. Un Ejecutivo que reclama y exhibe el debido proceso de algunos jueces que liberan delincuentes; una mayoría legislativa acusada de militarizar al país, y un Judicial que “está presionado por su ineficacia, complicidad y corrupción”.
Por otro lado, apuntó, también se encuentra la carne de cañón en que se han convertido las y los migrantes mexicanos y centroamericanos en Estados Unidos, para un grupo importante de políticos en campaña.