En un ambiente de color y tradición, el domingo pasado se llevó a cabo en las calles de Tláhuac la presentación del libro «02.11. Día de Muertos. Una celebración de la vida y la muerte», una obra que, desde ya, se considera un hito en la documentación y preservación de esta emblemática festividad mexicana. Bajo la mirada y presentación de Déborah Holtz, coautora del libro, el evento contó con el apoyo de Mole Doña María y Cerveza Victoria, quienes deleitaron a los asistentes y medios con su presencia, sumando sabor y autenticidad a la atmósfera del Día de Muertos que se vivió.
Holtz, que ha encabezado el proyecto junto con Juan Carlos Mena, expresó el arduo trabajo detrás de esta compilación, un esfuerzo de seis años que involucró a antropólogos, historiadores, ilustradores, fotógrafos y artistas de diversas disciplinas. «Esta obra no solo es un tributo a la tradición, sino una celebración de todo lo que somos, de nuestra identidad y de cómo hemos aprendido a vivir en comunión con la muerte”, señaló Holtz durante su discurso. Además, destacó que el libro ha sido reconocido como Mejor Libro de Arte 2024 por la Cámara Nacional de la Industria Editorial Mexicana (CANIEM), honor que subraya el valor cultural de este trabajo.
La presentación también tuvo un toque de espectáculo gracias a la pieza gigante creada por Jaén Cartonería Oficial, que llenó de vida y color el espacio. Asimismo, las Musas Sonideras amenizaron el evento con su música, logrando que el público disfrutara cada instante. Los vecinos de la calle Francisco Santiago Borraz y Calaveras Gigantes Tláhuac documentaron el evento cuyas fotos acompañan este texto.
La obra, publicada por Trilce Ediciones, ha sido catalogada como la compilación más exhaustiva dedicada al Día de Muertos. En sus páginas, el lector encontrará un recorrido por todas las manifestaciones relacionadas con la festividad, desde sus orígenes prehispánicos hasta su popularización global en el cine y la cultura contemporánea. «Queríamos crear un libro que no solo fuera visualmente impactante, sino que realmente capturara el sentido de esta celebración», expresó Holtz. El resultado es un recorrido que abarca desde las primeras representaciones de Mictlantecuhtli, dios azteca de la muerte, hasta las interpretaciones actuales en desfiles y películas, como la famosa escena de James Bond en «007: Spectre» y la emotiva animación de “Coco”.
El evento en Tláhuac fue solo el comienzo. La próxima gran presentación del libro está programada para el 2 de noviembre en el Panteón de San Fernando a las 5 de la tarde, como parte de las actividades del reconocido recinto histórico que alberga los restos de figuras emblemáticas como Ignacio Zaragoza, Benito Juárez e Ignacio Comonfort, entre otros. En este espacio, se planea un recorrido guiado especial que permitirá a los asistentes adentrarse en la esencia de esta celebración desde una perspectiva cultural y espiritual única.
La publicación de «02.11. Día de Muertos. Una celebración de la vida y la muerte» se realizó con el apoyo de diversas marcas que han abrazado la tradición y que se han sumado efectivamente en su promoción, como es el caso de Mole Doña María, un referente de la gastronomía mexicana, y Cerveza Victoria, que con su identidad visual tan ligada a la mexicanidad, aportaron para que este proyecto pudiera llegar al público en esta presentación.
Este libro no es solo para quienes desean profundizar en el Día de Muertos, sino para todo aquel que busque entender cómo una tradición puede sobrevivir, transformarse y seguir resonando en el mundo contemporáneo. Está disponible en librerías y Amazon y gracias a la colaboración con Rizzoli, también ha sido publicado en inglés, llevando esta invaluable obra a un público internacional. «Queremos que el Día de Muertos sea celebrado en todas partes, porque más que una festividad, es una forma de ver la vida y la muerte, de entendernos y reconciliarnos con ambos conceptos», concluyó Déborah Holtz.
«02.11. Día de Muertos. Una celebración de la vida y la muerte» es una obra que se perfila como indispensable en el acervo cultural de México y el mundo, una ventana a la historia y al espíritu de una tradición que, aunque profundamente mexicana, pertenece ya a toda la humanidad.