Susana Sánchez Segura
Crecen las farmacias independientes en México, hoy por hoy se encuentran en un proceso de consolidación que podría traducirse en un crecimiento cercano al 8% hacia 2030, comentario que hizo Juvenal Becerra Orozco, presidente de la Unión Nacional de Empresarios de Farmacias (UNEFARM).
Y es que antes de la pandemia de Covid-19 existían alrededor de 26 mil farmacias de este tipo en el país. Hoy, la cifra se acerca a las 30 mil, lo que refleja la importancia de este sector en la cobertura de salud de la población.
Es importante destacar, dice Becerra, que el fortalecimiento de las farmacias requiere un modelo integral que contemple capacitación, modernización de infraestructura, sistemas de punto de venta y delivery, lo que permitirá responder a la transformación tecnológica, la evolución del mercado y el aumento de la demanda de servicios médicos y medicamentos.
Por ello, realizaran el 15 Congreso Nacional Farmacéutico, el próximo 24 de septiembre en la Ciudad de México, encuentro que reúne a laboratorios, distribuidores y empresarios del sector para analizar estadísticas, tendencias y desafíos de la industria.
Este magno evento es un espacio clave para conocer innovaciones tecnológicas, estrategias comerciales y las crecientes necesidades de salud de la población. El panorama exige fortalecer a la farmacia mexicana para atender la demanda de medicamentos, particularmente ante el envejecimiento poblacional.
Las proyecciones indican que para 2050 alrededor del 22.5% de los mexicanos tendrá más de 60 años, lo que implicará un incremento de enfermedades crónico-degenerativas y una presión adicional sobre los sistemas de salud. Ante este escenario, UNEFARM llama a impulsar mesas de diálogo entre laboratorios, médicos, autoridades y asociaciones civiles para definir acciones conjuntas que garanticen acceso a medicamentos y atención médica.
Por tanto, hay que estar alertas sobre problemáticas que inciden en el sector, como la inseguridad en el traslado de fármacos, las extorsiones, el crecimiento del mercado irregular de medicinas y los aranceles que podrían imponer gobiernos extranjeros. “Se trata de desafíos que no deben pasarse por alto y que requieren coordinación entre todos los actores de la cadena de valor”, dijo Becerra.
La industria farmacéutica mexicana genera un valor anual cercano a 280 mil millones de pesos y constituye un eslabón estratégico en la atención de la salud pública. UNEFARM, hace un llamado a que farmacias, laboratorios, distribuidores y autoridades se sumen al Congreso, el cual será un punto de convergencia para delinear políticas y propuestas que fortalezcan al sector en beneficio de la población.
Además, los consultorios adyacentes a farmacias, junto con una trazabilidad adecuada de medicamentos, pueden jugar un papel fundamental en mejorar la atención de los padecimientos más frecuentes en los mexicanos. Esperemos que los acuerdos beneficien a la población.